Croacia es un país con múltiples caras que merece la pena explorar a tu aire. Hoy te proponemos la ruta en coche Zadar-Dubrovnik, que además de bonitos paisajes, te ofrece múltiples opciones para desviarte y parar en rincones que no aparecen en las guías de viaje.
Razones para explorar Croacia sobre ruedas
Croacia es mucho más que Dubrovnik y Split. Aunque esas ciudades suelen estar en todas las listas, las mejores experiencias siempre suelen suceder en los sitios menos pensados. Hay pueblos costeros donde querrás quedarte a vivir, playas que no tienen nada que envidiar a las de las ciudades conocidas y parques naturales que quitan el hipo.
Pero si quieres poder llegar a todos estos lugares con comodidad, necesitarás un coche de alquiler. Además de no depender del transporte público, que siempre tiene sus limitaciones, podrás seguir tus propios horarios y explorar a tu ritmo. Puedes improvisar, cambiar de planes si ves una cala que te encanta o alargar tu parada en un pueblo que no pensabas visitar. Además, las carreteras croatas, incluida esta ruta en coche Zadar-Dubrovnik, están en muy buen estado, bien señalizadas y con poco tráfico.
Ruta en coche Zadar-Dubrovnik
La ruta en coche Zadar-Dubrovnik completa tiene unos 350 kilómetros y se puede hacer en un solo día. Pero eso sería un crimen porque las paradas son tan importantes como las vistas. Lo ideal es tomárselo con calma y repartir el trayecto en al menos 4 o 5 días, con paradas estratégicas, como las siguientes:
Zadar: una ciudad con sonido propio
Zadar es el punto de partida. Una ciudad que combina ruinas romanas, arquitectura veneciana y creatividad moderna. Te llamará la atención el Órgano del Mar; una instalación que convierte las olas en música. También es un buen lugar para disfrutar de la puesta de sol desde el paseo marítimo. Según Hitchcock, la más bonita del mundo. No te vayas sin probar una maraschino, el licor de cereza local.
Parque Nacional de Krka
A una hora y poco de trayecto, toca la primera para de la ruta en coche Zadar-Dubrovnik. Krka es conocido por sus cascadas, pero sobre todo, porque podrás nadar en ellas. Algo que no sucede en los Lagos de Plitvice. Verás senderos de madera que serpentean entre los saltos de agua; si llegas pronto, quizás haya alguna poza sin compañía.
Šibenik: la sorpresa de piedra
Esta ciudad costera suele quedarse fuera del radar, pero es un error. Tiene una catedral que es Patrimonio de la Humanidad, preciosas callejuelas empedradas que invitan a pasear y unas vistas increíbles desde la Fortaleza de San Miguel. Ideal para un almuerzo tranquilo frente al mar y para estirar las piernas antes de seguir por carretera.
Split: historia y playa en un solo sitio
Toca parada conocida en Split, la ciudad más grande de Dalmacia y cuyo centro histórico parece un museo al aire libre. El Palacio de Diocleciano es una ruina romana, pero cuenta con tiendas, bares y hasta apartamentos en su interior. Puedes quedarte a dormir aquí y disfrutar del ambiente nocturno, o simplemente dar un paseo por el puerto y seguir tu camino.
Makarska y la Riviera
Este tramo de costa de la ruta en coche Zadar-Dubrovnik merece ir sin prisas. En Makarska podrás bañarte en calas con aguas turquesas y playas de guijarros rodeadas de pinos. Si te gusta conducir con vistas, este es tu momento estrella. La carretera serpentea entre acantilados y mar, con curvas que regalan panorámicas constantes. Te darán ganas de ir parando cada pocos kilómetros para darte un chapuzón.
Ston: murallas y ostras
Justo antes de llegar a Dubrovnik, haz una parada en Ston. Aquí se encuentra una de las murallas más largas de Europa, aunque también es conocida por los criaderos de ostras. Puedes subir a lo alto para ver las vistas o sentarte en una terraza y probar marisco fresco sin pagar los precios de Dubrovnik.
Dubrovnik: la joya final
El destino final de la ruta no necesita mucha presentación. Dubrovnik es una ciudad amurallada con calles de mármol, tejados rojizos y vistas al Adriático. Aunque es bastante turística, merece la pena caminar por las murallas y el casco antiguo. Eso sí, si vienes con coche, busca alojamiento con parking o déjalo en las afueras, porque el tráfico en el centro es misión imposible. Si es tu última parada en tu viaje, en Dubrovnik podrás devolver tu coche de Ok Mobility.
¡Escoge ya tus fechas de recogida y tu ciudad y céntrate en elegir las paradas de tu viaje!
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