Si estás buscando planes en Marsella en verano, no te pierdas las propuestas que te dejamos para este destino. Mar, cultura y gastronomía que se dan la mano para ofrecerte tanto una cara urbana como otra salvaje.
¿Por qué viajar a Marsella este verano?
Marsella es una ciudad que se encuentra en el sur de Francia. Tiene una personalidad muy auténtica y por eso cautiva con poco esfuerzo a quienes viajan allí. Su puerto carga el peso de siglos de historia, y con el mar Mediterráneo siempre de fondo, por aquí han pasado incontables culturas. Y es precisamente esta fusión la que se palpa en cualquier esquina, con graffitis de Le Panier o aromas a especias que salen directamente de los mercados.
Aunque se puede visitar durante todo el año, los planes en Marsella en verano se disfrutan mucho más. Las terrazas están abiertas y se llenan de gente, los barcos van y vienen por el Vieux-Port y las playas urbanas, como la de Prado, están en su mejor momento.
Pero si quieres aprovechar bien la escapada y no quedarte con los principales puntos de interés de cualquier guía turística, busca un coche de alquiler. Marsella es un buen comienzo para conocer la región de Provenza-Alpes-Costa Azul. Con OK Mobility, puedes recogerlo en el mismo aeropuerto. Y si a la vuelta cambias de ruta porque quieres hacer rutas en coche por Francia, también hay oficinas en Niza y en Lyon.
Planes en Marsella de verano
Si buscas planes en Marsella de verano, aquí van nuestras propuestas:
Darse un baño en las Calanques
El parque de Les Calanques es famoso por las formaciones rocosas de roca caliza entre Marsella y Cassis. Pero aunque los acantilados son impresionantes y las vistas aún mejores, la visita no está completa sin el chapuzón. Hay calas perfectas para nadar, hacer kayak o simplemente tomar el sol. Las más accesibles desde la ciudad son Sormiou, Morgiou y Callelongue.
Subir a Notre-Dame de la Garde al atardecer
Desde el puerto viejo, puedes hacer una caminata de unos 45 minutos hacia la montaña para llegar a esta basílica. Incluso si no eres fan de este tipo de arquitectura, vale la pena por las vistas de la ciudad. Es el mejor mirador para ver cómo se pone el sol. Y si no quieres andar, siempre puedes subir en coche.
Explorar Le Panier sin rumbo fijo
Le Panier es un barrio histórico y símbolo de la antigua Marsella. Es conocido por sus callejones estrechos y coloridos, con ropa tendida en los balcones y con fachadas llenas de murales. Como era de esperar, es el barrio bohemio, donde se combinan talleres de artistas, tiendas de diseño y cafés que invitan a entrar. Una zona ideal para perderse unas horas.
Día de museo y paseo por el MuCEM
El Museo de las Civilizaciones de Europa y del Mediterráneo es tan interesante por dentro como por fuera. Su arquitectura es espectacular, y el puente que lo une con el fuerte Saint-Jean es otro mirador gratuito. Y ahí no acaba todo, al estar junto al mar, es otra zona donde apetece tomarse algo con vistas.
Comer bouillabaisse con vistas al puerto
La bouillabaisse no es una sopa de pescado cualquiera, sino el plato típico de la ciudad. Se asemeja a la caldeirada gallega, porque al fin y al cabo, ambos sitios se nutren del mar. La puedes probar en restaurantes como Le Miramar o Chez Fonfon, donde la preparan como manda la tradición. Ambos están cerca del Vieux-Port.
Ir a un concierto o cine al aire libre
Con la llegada del buen tiempo, los planes en Marsella en verano incluyen sí o sí los festivales y conciertos al aire libre. Por ejemplo, proyecciones de películas en parques, conciertos en plazas o festivales de música donde menos te lo esperas. Puedes mirar la programación del Festival de Marseille o los ciclos que organiza el Théâtre Silvain, un anfiteatro frente al mar.
Pasear por la Corniche Kennedy en bici o patinete
La Corniche es una de las carreteras costeras más bonitas de Marsella. Puedes recorrerla a pie, en bici o con patinete eléctrico, mientras disfrutas de las vistas al mar y del aire cálido del Mediterráneo. Hay bancos frente a las calas, chiringuitos y rincones tranquilos para hacer una pausa. Ideal para una tarde relajada.
Al final, Marsella no es solo un destino, sino tu punto de partida para explorar a fondo el sur de Francia. Alquilando un coche en Marsella con OK Mobility, tendrás la libertad de moverte a tu ritmo y descubrir todo lo que esta región tiene para ofrecer. Puesto que las conexiones son excelentes, aprovecha la visita y no dejes pasar la oportunidad de conocer otras ciudades del país. En OK Mobility, ¡vamos contigo!
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