Comprar un coche de segunda mano puede ser una buena alternativa, pero antes de tomar la decisión debemos asegurarnos de que vamos a estar respaldados como consumidores. Lo que menos deseamos es que, después de gastar nuestro dinero, el vehículo tenga algún defecto y tengamos que afrontar una costosa reparación, y es ahí donde radica la importancia de la garantía.
Los vicios ocultos en coches de segunda mano
Un coche es un bien de uso común que está expuesto a un desgaste constante. Desafortunadamente, no todos los fallos y averías que pueda tener un vehículo de este tipo son apreciables a simple vista, lo que nos lleva a hablar de los vicios ocultos.
Se consideran vicios ocultos en un coche de segunda mano aquellos fallos graves que impiden su utilización o la dificultan mucho. Hasta tal punto que, si el comprador los hubiera conocido, no habría realizado la compra, o hubiera exigido una rebaja notable en el precio.
Un vicio oculto puede ser, por ejemplo, un fallo en la caja de cambios que no es apreciable a primera vista, pero que genera problemas durante la conducción a velocidades altas, de modo que hace vibrar el coche y hace que su manejo resulte incómodo.
Si adquieres un vehículo y unos días después aprecias que puede tener un vicio oculto como este, u otro similar, tienes derecho a que el vendedor se haga cargo de la reparación, ya que en eso consiste la garantía.
La garantía en un coche de segunda mano
En nuestro ordenamiento jurídico tienen garantía los bienes nuevos, pero también aquellos que se venden de segunda mano, y esto incluye a los coches y todo tipo de vehículos. De hecho, la legislación cambió a principios de 2022 y se han producido ajustes en materia de garantía.
Eso sí, debes tener en cuenta que los plazos no son iguales si compras tu coche de segunda mano a un compraventa profesional que si lo haces a un particular. Porque en el segundo caso se aplica una legislación diferente.
Plazo de garantía de coches de segunda mano adquiridos a un profesional
La entrada en vigor del Real Decreto-Ley 7/2021 ha supuesto cambios con respecto a la garantía en los bienes adquiridos nuevos y de segunda mano. Tratándose de un coche de segunda mano comprado a un profesional, el plazo de garantía continúa siendo de un año (voluntariamente el profesional puede extenderlo hasta dos), pero se ha producido un cambio significativo en la protección del consumidor.
Antes, si aparecía alguna avería o vicio oculto, el comprador debía demostrar que el mismo existía antes de la operación de compraventa. Esto, como es lógico, dificultaba mucho el poder reclamar nada al vendedor. Sin embargo, ahora la ley determina que el vendedor debe hacerse cargo de la reparación de las averías que aparezcan en los 12 meses siguientes a la compra si las mismas no estaban especificadas en el contrato.
En el caso específico de los coches de kilómetro 0, de segunda mano u ocasión que todavía estén en garantía oficial, esta se mantendrá durante el tiempo que le quede de vigencia, así que el comprador podrá reclamar directamente a la marca si aparece alguna avería.
Plazo de garantía de un coche de segunda mano comprado a un particular
Las compraventas entre particulares se rigen por una normativa diferente. No se aplica en este caso el RD 7/2021 sino las disposiciones del Código Civil sobre los vicios ocultos. Según estas, si las partes no han pactado nada diferente en el contrato, la garantía será de seis meses.
En estos casos, la carga de demostrar que el vicio existía antes de la transmisión del vehículo recae directamente sobre quien reclama.
¿Cómo evitar problemas al comprar un coche de segunda mano?
Los profesionales y empresas que se dedican a la compraventa de vehículos de segunda mano deben ofrecer una garantía de un año, y ahora tienen que hacerse cargo de las reparaciones aparecidas en ese tiempo sí o sí, porque lo dispone la ley. Sin embargo, si compras tu vehículo a un particular, la garantía solo dura seis meses y, en caso de surgir algún problema, deberás demostrar que éste estaba presente en el coche antes de que tú te convirtieras en su propietario. Por eso, lo mejor en estos casos es adquirir siempre vehículos de segunda mano a través de profesionales.
No solo obtienes una garantía mayor y en mejores condiciones, sino que sabes que todos los coches han pasado por una estricta revisión antes de ser puestos a la venta, lo cual es un plus a tu favor como comprador.
Un coche de segunda mano siempre va a tener garantía, pero exigírsela a un profesional siempre será más sencillo que a un particular. ¿Estás pensando en cambiar de vehículo? ¡No te pierdas nuestras ofertas!
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